Cartas finlandesas

Nació en Granada, en 1862, y murió en Riga, arrojándose a las aguas del Báltico en 1898. Fecha esta última que da nombre a una generación literaria capital y de la cual Ganivet es adelantado pre­cursor. Espíritu verdaderamente inquieto, mentalidad profundamente original, Ganivet pulió su autodidactismo merced a largas residencias en lejanos sitios de Europa adonde le llevó su carrera consular.

Escritor de dotes plurales —al modo de Unamuno con quien guarda varios puntos de semejanza— cultivo diversos géneros, pero su fisonomía esencial es la de ensayista. Y en esta dirección su obra más famosa es el Idearium espanol (1897). Otros libros importantes suyos son: Granada la bella, el drama El escultor de su alma y dos singulares novelas: La conquista del reino de Maya y Los trabajos del infatigable creador Pío Cid. No menos valor adquieren hoy día sus Cartas finlandesas, que Ganivet escribió en 1898 desde Helsinafors —hoy Helsinki—, donde a la sazón era cónsul de España. Pese al medio siglo transcurrido esta obra guarda un interés incuestionable, por la suma de noticias y puntos de vista que desfilan en sus páginas, y sigue siendo, en suma, el testimonio más agudo y completo que poseemos sobre Finlandia en nuestro idioma.